Creo que deben conocer mi testimonio ya este cambio mi vida

Me casé en 1999 a los 32 años de edad, en el 2002 empezamos la tarea de encargar un bebé, no pasaba nada así que decidimos ir al doctor en abril del 2003, sin saber que en ese momento ya estaba embarazada.

Pero ese “Embarazo” Resultó ser un embarazo ectópico tubario situado en la trompa derecha, inviable y peligroso ya que en este tipo de embarazos hay riesgo de vida para la madre.

El Doctor Yasson Trientafilo me trato con Metrotextato, para no operar la trompa, operarla significaba extraerla y había esperanza de poder salvarla. El Metrotexato  es una droga de las que se usan en Quimioterapia que evitaría la operación,  destruyendo el trofoblasto,  provocando así la reabsorción del embrión (en realidad lo que hay es casi puro tejido de trofoblasto).

Esa trompa quedo dañada, se tapo,  así que con seguimiento folicular  y un poco de serofene  se intento que ovulara por la trompa izquierda y en diciembre del 2003 nuevamente un embarazo, pero… algo iba mal . Después de varios seguimientos en los que no se veía el embrión, resulto ectópico, tubario otra vez!, pero ahora en la trompa izquierda.

Hubo que operar de urgencia el día 2 de enero del 2004 de urgencia, la trompa estaba hemorrágica. Como resultado de la operación me sacaron las dos trompas ya que ambas habían quedado inutilizadas.

Después de eso mi optimismo no me dejo sola, aún tenía mi útero, y asi empezamos la larga carrera de las fertilizaciones in vitro, en las dos primeras nada, la tercera fue un Icsi ( se elije tanto el ovulo como el espermatozoide) , dado que el espermiograma de mi marido no era muy bueno.

Con 2 icsi hubo dos Betas positivos, pero se perdían a las 6 semanas.

Al tercer tratamiento de fertilización me descompense con el exceso de hormonas,  y partió el drama de la Irrigación sanguínea. Hasta ese entonces las fuertes cargas hormonales de las fertilizaciones afectaron mi elasticidad arterial, le llamaron a esto disfunción endotelial, ocurre que la elasticidad arterial normal para una persona es de 4,5% hacía arriba y la mía era del 2,5%,  con El Doctor Alfredo Germain a la cabeza especialista en embarazos de riesgo, quien estaba estudiando los pocos casos como el mío que había en ese entonces, partimos con L-Arginina y Fragmin (heparina), para lograr mejorar los parámetros de elasticidad ya que en un embarazo la carga de sangre de la madre es mayor y sin que las arterias sean elásticas puede ocurrir un alza importante de presión muy peligrosa y romperse una arteria. La L-Arginida es un vaso dilatador y ayuda con la producción de Oxido nítrico en el cuerpo , todo a su vez mejora  elasticidad y el fragmin es un anticoagulante. Con todos estos remedios a cuesta y con el peligro de andar por la calle con anticoagulantes,  deje de manejar y de trabajar, solo para evitar tener un accidente que podía ser fatal consumiendo heparina.  A pesar de eso  nada, nunca más un embarazo positivo, en total llevaba 9 tratamientos (2 fiv, 3 icsi y 4 transferencias de mis embriones congelados).

Mi respuesta ovárica era fantástica y mis óvulos de excelente calidad. En ese punto ya te lo cuestionas todo, vi muchas pacientes que dejaban después de la primera fertilización los tratamientos porque son muy desgastantes no solo económicamente, sino que emocionalmente. Una de las matronas a la que llamábamos entre las pacientes Cruela Devil me decía que para que seguía con los tratamientos, si jamás lo iba a conseguir, gracias a Dios no le hice caso.

 En ese momento el Dr. Yasson Trientafilo mi médico de cabecera,  me dijo que cambiáramos de médico, que a lo mejor era él, yo me apene mucho,  porque yo sabía que no era él, él era mi médico de siempre y para mí fue traumático dejarlo, pero debía intentarlo, me traspaso a su colega el Dr Emilio Fernandez.

En ese momento corría Diciembre del 2006 y Emilio estaba copado de pacientes y me corrió como dos veces la visita porque además después se fue de vacaciones, en resumen la próxima hora con él era varios meses después, yo en ese momento sentí y supe que era una señal, que debía esperar y buscar otra alternativa, que algo faltaba.

En Marzo del 2007 nos conocimos con Emilio y me hizo una biopsia, donde me encontró una pequeña inflamación en el útero la que me trató con medicamentos. A mi marido también lo trataron con medicamentos porque el espermiograma era deficiente, había un 80% de mortalidad y un 15% de motilidad.

En ese tiempo y dado que Emilio estaba congestionado de pacientes y me seguía por suerte mía chuteando para adelante, (cosa que ahora entiendo), alargando el tiempo con exámenes otra biopsia y una montonera más, incluso uno que no se hacía en chile, al que yo me opuse, porque eran hasta ese entonces muchos los exámenes dolorosos y caros. … Y mientras esperaba que Emilio me volviera a atender, seguí mi intuición y me tome un tiempo para mi,  incursione en otras áreas hice un curso de Radiestesia y Geobioloía, Reiki, Terapia floral y Biomagnetismo del que actualmente soy terapeuta.

EL Biomagnetismo fue el cambió mi vida, el Dr. Isaac Goiz Duran (1941-2021), mi maestro, colega y amigo, me dio las respuestas que nunca nadie me había dado y los motivos de la inflamación de mi útero, me los corrigió con un par de imanes,  y solucionó mi problema de disfunción endotelial.

Yo por mi parte como nueva terapeuta traté a mi marido, mejorando considerablemente su espermiograma, algo que las vitaminas que le administraron nunca hicieron, logramos un 65% de motilidad.

Después de sentirme de alta y dar de alta a mi marido con el Biomagnetismo, fui de nuevo donde Emilio Fernandez y le di argumentos suficientes para no hacer otra biopsia, y suspender un listado de nuevos exámenes y partir ya! con el siguiente tratamiento, el ICSI número 10.

Emilio me vio tan segura de que yo estaba bien y conociendo por otras personas el resultado de la terapia con imanes, me sugirió subimos a un ciclo con la mínima cantidad de medicamentos, algo que iba a tener que explicar en la junta médica ya que todos seguían mi caso,  todo esto en noviembre del 2008.

Esta vez yo era otra, la trasferencia de mi embrión fue el 28 de noviembre y yo tenía el primero de Diciembre un matrimonio en Viña y fui, lo cuento porque las otras veces hacía cama hasta el día de la beta   (el primer examen confirmativo de embarazo) y todos los cuidados no dieron fruto. Pero yo sabía que esta vez era distinto.

Alfredo no me había encontrado hasta el momento problemas en la irrigación a si que solo estaba con la Arginina en dosis suficiente de prevención  y Progendo. A Diferencia de las veces anteriores,  hasta ahí mi irrigación era mejor que normal.

Mi primera beta fue 9, la Matrona, la Teresita,  no se dio cuenta y me la pidió un día antes, la verdad es que todos en casa y en la cínica estábamos muy ansiosos,   la segunda fue 36 y la tercera 458, ahí respiré.

Luego el pánico casi se apodera de mi, la semana 6 manche una vez rojo, fue cuando fui al baño a orinar.

Le avise a Alfredo y a Emilio enseguida, cabe recordar que por mi edad 39 años era un embarazo de alto riesgo. Me mandaron a la cama agregando Mirión al coktail de medicamentos. Ese mal rato pasó y todo fue bien hasta la semana 13.

Recién a las 11 semanas partimos con fragmín para prevenir, porque el factor de coagulación no fue el esperado.

La Semana 13 desperté un día con una tremenda mancha roja, me fui a urgencia y me mandaron a la casa, pasó y al día siguiente otra vez, ahí Alfredo me hospitalizó en la uci hasta que paró el sangramiento, al parecer hubo un pequeño desprendimiento que gracias a Dios se solucionó rápido.

Estuve con licencia hasta la semana 20 y allí recién comencé a salir y a disfrutar de la guata que tanto deseaba por tantos años, que por cierto era harto grande. Digo disfrutar, porque además de sentirla y verla te ceden el lugar en muchas partes y en el Supermercado puedes andar en esos carritos eléctricos que son espectaculares, pero me duró poco, en el control de las 23 semanas Alfredo encontró que el cuello del Útero disminuyo en un 25%, a si que de nuevo me mandó a la cama y ahí me quede,  hasta la semana 33.

 Cursaba el 4 de julio, el cumpleaños de mi madre y fui a control, mi maleta estaba en casa hecha porsiacaso. En el control me encontraron 1% de dilatación, celebramos el cumpleaños en la clínica, me hospitalizaron, había que retardar el mayor tiempo posible el nacimiento de mi princesa.

Los exámenes marcaban unas contracciones gigantescas que nunca sentí.

Mi hermosa hija nació bien a las 34 semanas, el 10 de Julio del 2008, con 42 cm y apenas 2 kilos 150 gramos.

Gracias a Dios no necesito incubadora ni soportes y hoy está Sana y es la prueba viviente que la medicina alternativa complementaria y la medicina alopática debieran dase la mano y caminar juntas por la vida para poder cumplir el sueño de muchos, ser Sanado. 

Por eso digo que no todo está dicho por parte de la ciencia y que hay muchos caminos que aprender y jamás nunca darse por vencido.

Examenes